Cachorro de Labrador Retriever
En la selección del labrador retriever, lo primero es elegir bien a los progenitores. Para ello, seleccionaremos un buen cruce. En Labradores de Abantueso buscaremos perros que estén libres de enfermedades que puedan transmitir a su descendencia. Como por ejemplo: displasia de caderas, codos, taras oculares etc. Además, habremos contrastado su carácter y temperamento. A partir de este momento, realizaremos el cruce esperando una buena camada.
Además de dedicarles mucho tiempo a observar su comportamiento dentro de la camada, les sometemos a una serie de pruebas individuales y de tests. Para determinar los parámetros de su carácter y temperamento. Y poder realizar un buen emparejamiento entre los ellos y su nueva familia. Además, seleccionamos a los cachorros de labrador retriever que irán destinados a realizar trabajos específicos. Como, por ejemplo, caza, asistencia a personas, perros guía, de rescate o búsqueda, etc.
Uno de los tests, que más utilizamos y más parámetros nos da del potencial genético del cachorro de labrador retriever es el test de Campbell. Junto con otra serie de pruebas, no siendo definitivos sus resultados, puesto que el medio en el que se crían será de gran influencia para su futuro carácter de labrador.
Test de Campbell
Su creador William Campbell es un reconocido especialista norteamericano en lo que se refiere a conducta canina. Es uno de los test más utilizados para conocer el temperamento de nuestros cachorros de labrador retriever. Si se hace bien, se obtendrán buenos resultados. Este test consiste en la realización de cinco pruebas que se desarrollan en unas determinadas condiciones y por manos expertas.
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A) ATRACCIÓN SOCIAL
Se colocan los cachorros de labrador retriever en el centro del recinto, en silencio. Nos alejamos unos pasos, nos arrodillamos y palmeamos suavemente para llamar su atención.
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B) SEGUIMIENTO
Partiendo desde una posición cerca a los cachorros de labrador retriever y asegurándonos de que mantiene su atención en nosotros, nos alejaremos lentamente de él con naturalidad y sin llamarle. Descubriremos así su grado natural de dependencia e independencia.
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C) ACEPTACIÓN DEL SOMETIMIENTO
Colocamos los cachorros de labrador retriever boca arriba sobre el suelo, apoyando una mano sobre su pecho, le mantendremos en dicha posición hasta que se calme. El grado y tiempo de agitación nos indicará su nivel de aceptación del manejo.
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D) DOMINANCIA SOCIAL
Acariciamos a los cachorros de labrador retriever con firmeza desde el cuello hasta la grupa cuando le mantenemos en pie podremos apreciar la aceptación jerárquica de nuestro dominio sobre él. Según la tendencia a mantenenerse estático o a saltar sobre nosotros, mordisqueándonos o incluso gruñendo.
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E) DIGNIDAD
Colocamos las manos entrelazadas debajo del tórax y los levantamos sin que sus patas toquen el suelo. Tras mantenerlo en esta posición durante treinta segundos, podremos anotar el grado de aceptación de la dominancia del guía, al perder el control libre de sus movimientos.
Campbell otorga cinco niveles de respuesta al primero, al segundo y al cuarto apartados del test. Al tercero, cuatro niveles, y al quinto tres. También se tiene en cuenta el grado de manifestación de la conducta esperada.
Este test de Campbell lo complementamos con otra serie de pruebas técnicas, como por ejemplo:
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SENSIBILIDAD AL RUIDO. Es importante comprobar la tolerancia del labrador retriever a los ruidos cotidianos (ej. pitidos, cohetes, ruidos de coches, etc..). Así como a la hora de destinar a alguna función donde el ruido sea una parte importante del trabajo como. Por ejemplo, las detonaciones del disparo en la caza.
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SENSIBILIDAD CORPORAL, para calibrar la resistencia física en situaciones extremas.
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INSTINTO DE PERSECUCIÓN, comprobar si los cachorros de labrador retriever tienen instinto de seguir objetos y seres vivos en movimiento.
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INSTINTO DE COBRO, forma de cobrar y entregar las piezas, prueba definitiva para medir la colaboración con el ser humano y la selección.
información sobre los rasgos genéticos
* Estos tests y pruebas nos darán mucha información sobre los rasgos genéticos de su carácter y temperamento como, por ejemplo, la sociabilidad, dominancia, agresividad, posesión, sensibilidad, sumisión, colaboración, potencial para el trabajo etc.
Consejos de Crianza. Primer día en casa
Comienza su nueva vida. Su madre y hermanos han sido su manada y ahora entra a formar parte de su nueva manada. El desapego de la familia canina es un duro trance que genera cachorro de labrador retriever inseguridad y estrés.
Nosotros hemos trabajado para que afronte esta situación con buena actitud y para que se adapte a ella lo antes posible. Con ese fin hemos establecido un programa de socialización temprana. Que se basa en presentar de forma paulatina a los cachorros de labrador retriever a distintas situaciones ambientales y de manipulación, por ejemplo ir en coche.
El primer viaje en coche debe realizarse en los pies del copiloto. Si acude a recogerlo una sola persona, el labrador retriever debe ir en un transportín, nunca suelto, aunque el maletero esté preparado para ello, ya que iría moviéndose de un lado a otro, podría marearse y vomitar.
dejar a nuestro pequeño en el suelo
Al llegar a casa debemos dejar a nuestro pequeño en el suelo para que descubra su entorno. Puede que se muestre tímido y asustado, pero no hay que consolarlo, porque así sólo potenciaríamos una conducta miedosa e insegura. Hay que animarlo y estimularlo mediante palmadas y un tono de voz agradable para que explore la casa, dejándole curiosear todo, pero siempre vigilando.
En algún momento hará su primer “pis”, probablemente en un lugar no permitido, pero no debemos castigarlo, en especial durante las primeras veinticuatro horas.
Es muy habitual y, sobre todo si hay niños en casa, cogerlo para desplazarlo. A esta edad temprana los cachorros de labrador retriever son muy vulnerables y una caída podría generarles un problema físico y psíquico. La forma correcta de cogerlos es, con una mano debajo del pecho, y la otra entre sus patas posteriores. Nunca debemos coger y levantarlo agarrándolo de sus patas delanteras.
La primera noche del cachorro de labrador
La primera noche el cachorro de labrador retriever, deberá permanecer en el lugar que previamente hayáis dispuesto. Debe ser un lugar seguro (sin objetos ni productos que puedan dañarlo si los ingiere) y con un suelo fácil de limpiar. En dicho lugar tendrá su cama-toalla-manta, agua para beber y algún juguete para morder.
Nuestra recomendación es que el cachorro de labrador retriever duerma en una jaula o transportín, que es un lugar excelente por varios motivos. Primero, le va a gustar porque hace el efecto de “madriguera” y esto es una conducta natural.
Por otro lado, se puede trasladar a cualquier sitio y así las primeras noches puede permanecer en el dormitorio, donde el animal estará tranquilo, no se sentirá solo, no habrá gemidos ni ladridos y, cuando sea oportuno, se ubicará en el lugar elegido para que duerma.
futura educación del cachorro
Y, por último, aunque este tema lo abordaremos con mayor detenimiento posteriormente, la jaula es una herramienta muy importante para la futura educación del cachorro de labrador retriever, como por ejemplo, para enseñarle los hábitos de eliminación y para evitar que destruya y rompa objetos.
Alimentación del Labrador Retriever
Debe tomar un pienso de alta calidad adecuado a su edad, en este caso pienso de cachorros. Hasta los seis meses comerá tres raciones diarias (desayuno-comida-cena).
A partir de esta edad pasamos a dos raciones (desayuno-cena), hasta el año. De aquí en adelante, nuestra recomendación es que siga con esta pauta durante toda su vida. Algunos tienen tendencia a tragar sin masticar y por tanto a atragantarse y regurgitar la comida. Para que esto no ocurra podemos dividir cada toma en dos.
Cantidades
En los sacos de alimentación de nuestro nuevo amigo, viene una tabla con las cantidades recomendadas por el fabricante que a nuestro juicio son orientativas, pero debemos hacernos verdaderos expertos en la cantidad exacta que debemos darle, ya que cada individuo tiene unas necesidades energéticas particulares.
Para esto es importante que contemos con el asesoramiento de nuestro veterinario, criador de labrador retriever y expertos en perros, que nos ayudarán a conseguir que nuestro cachorro esté en su peso ideal: ni gordo ni delgado.
Es importante ser consciente de lo malo que es para sus articulaciones que esté gordo durante la fase de crecimiento. Ya que puede producirle displasia de cadera y/o codos. Igualmente es malo que esté delgado, pues una mala nutrición también tiene consecuencias negativas para su desarrollo.
Salud en el Labrador Retriever
Vacunación
El protocolo de vacunación que utilizamos es el siguiente: a la séptima semana de edad (puppy), en la novena (tetravalente) y en la decimotercera (tetravalente).
Lo normal es entregar los animales en la octava semana de edad, una semana después de su primera vacuna.
Desde la entrega del cachorro de labrador retriever, hasta la novena semana (2ª vacuna tetra) el cachorro debe de permanecer en casa, aunque puede salir al jardín privado en caso de tenerlo, controlando que no enferme a causa de posibles gastroenteritis producidas por comer cosas no debidas (tierra, etc.).
Es importante controlar también el estrés por el cambio de hábitat, ya que genera inmunosupresión del cachorro de Labrador Retriever. No debe salir a la calle para evitar contraer enfermedades contagiosas (ejem; parvovirosis, moquillo).
Después de la revisión veterinaria y segunda vacuna, el labrador retriever debe permanecer en casa 10 días más mientras va adquiriendo inmunidad. A partir de este momento empezará a salir a la calle, pero no a sitios de riesgo como, por ejemplo, parques y zonas donde habitualmente acuden otros perros.
Se deben maximizar las precauciones hasta que el cachorro de labrador retriever esté totalmente inmunizado, lo que suele suceder a partir del mes desde la última vacuna.
Desparasitación del labrador retriever
Cuando salen del centro, están desparasitados según nuestro programa de medicina preventiva. Este programa de desparasitación del cachorro de labrador retriever, tanto externa como interna, debe continuar con las recomendaciones de su veterinario.
Displasia de cadera y codo del Cachorro de Labradror Retriever
Tanto la displasia de cadera, como la de codo, son enfermedades del desarrollo con una base genética-hereditaria (progenitores) y otra influenciada por el medio (alimentación, el suelo que pisa, ejercicio…).
En lo referente al componente genético del Cachorro de Labrador Retriever, es importante exigir al criador que sus reproductores hayan sido evaluados frente a dichas enfermedades, con sus certificados oficiales.
El que podamos garantizar que los padres del cachorro de labrador retriever no tienen displasia no implica que los hijos no la vayan a desarrollar. Por tanto es muy importante que desde el principio seamos conscientes de que el cachorro puede haber heredado la predisposición a padecerla. Y por tanto, tomar las medidas necesarias para disminuir el grado.
En sus primeros meses de vida, no tiene desarrollada su musculatura y, por tanto, no hay nada que proteja su esqueleto.
Los factores que influyen negativamente en el desarrollo músculo-esquelético son:
· Nutrición: desajuste en la cantidad a ingerir.
· Suelos resbaladizos; es importante no incentivar juegos en dichos suelos.
· Subir y bajar escaleras con mucha frecuencia.
· Ejercicio excesivo.
· Dormir en suelo duro.
· Juegos con otros perros descompensados en edad.